Consciente de esto, la diseñadora chiapaneca Mildred Rubin creó un modelo de negocio para que la mujer indígena, mediante capacitaciones y apoyos sociales, pueda trabajar desde su casa sin descuidar a su familia.
Con esto se ha pretendido generar un ambiente de colaboración económica de mujer a mujer que beneficia a sus familias y comunidades, convirtiéndolas en una alternativa donde tengan beneficios reales y mejores ganancias.
Este modelo de negocio propuesto por Mildred Rubin ha logrado cambiar la mentalidad de muchas mujeres indígenas, convirtiéndose en un motor de crecimiento para todas.